dilluns, 30 de novembre del 2009

Máscaras.

- ¿Quién eres?
- ¿Quién?
- Tú.
- ¿Yo?
- Si.
- Yo soy tu.
- ¿Yo?
- Si.
- Entonces, si tú eres yo, significa eso que si me quedo horas aquí mirándote fijamente, ¿podré conocerme a mi misma en plena totalidad?
- No.
- ¿Por qué?
- Porqué aunque te quedes horas, días e incluso semanas mirándome fijamente, tan solo verás el exterior, porque no estarás tratando de conocerme.
- Pero si me fijo bien, creo que si.
- Ni aún así, porque actúas, pero no sólo tu tranquila, todos lo hacen, por eso nunca nos acabamos de conocer del todo; esto es como una obra de teatro, naces y creces, y te dan el papel que tienes que intentar desarrollar al largo de tu vida, pero por el cuál nunca te aplaudirán.

dimarts, 24 de novembre del 2009

Si naciésemos cuerdos no seríamos personas.
Con el tiempo la cordura va apareciendo,
aunque no en todos los casos.
Y hay quiénes directamente no queremos
que aparezca
en nosotros.

divendres, 20 de novembre del 2009

Podré.

Llegó el momento en el que creí que era capaz de soportar todo lo que se me viniese encima, y no sabía si eso era bueno o malo; dicen que hay heridas que no salen hasta que no ha pasado un tiempo. Creí que aunque viniesen 367 lágrimas, 154 tardes de gritos, 18 bofetadas, 947 miradas de rabia, y todavía más esperas... sería capaz de soportarlo una vez más y las que hiciesen falta, y esperé que las heridas hubiesen cicatrizado bien en ese período de tiempo que ya había pasado..

diumenge, 15 de novembre del 2009

Preguntas (por ahora sin respuesta).

¿Qué?
¿Cómo?
¿Por qué?
¿Cuándo?
¿Quién?
¿Cuál?
¿Para qué?

dijous, 12 de novembre del 2009

Sin saber si olía a muerto nuestro triste y asqueroso corazón.

Apestaba. Iba de un lado al otro del pasillo y escuchaba los llantos. Todavía más fuerte escuchaba los gritos. Notaba como retumbaban todas sus paredes. Sentía como el bombeo de sangre cada vez se aceleraba más. Creo que noté tan a flor de piel todo los sentimientos, que pensé en cambiar. Me dí cuenta que hasta el momento solo había escapado. No estoy echa para encadenarme a alguien; no estoy echa para atarme los grilletes y darle las llaves a otro, no estoy echa para nada de esto (y lo tengo comprobado), pero quizás estaba empezando a anhelar encontrar a alguien como yo, que le pasase lo mismo, sin ganas de tener marcas de ataduras en el cuerpo.

No buscaré, ya llegará (aunque los príncipes azules siempre destiñan...).